Timothy Lilley, padre de Sam Lilley, el piloto fallecido en el accidente aéreo en Washington, DC, destacó la profunda fe cristiana de su hijo, afirmando que estaba “bien con Jesús”. A pesar del dolor por la pérdida, Tim encontró consuelo en la fe de Sam, lo que le brindó paz en medio de la tragedia.
Al hablar con News Nation, Tim Lilley reiteró que la fe de su hijo era un pilar fundamental en su vida.
La colisión, ocurrida cerca del Aeropuerto Ronald Reagan, dejó un vacío profundo.
La certeza de que Sam estaba en un “lugar mejor” según su fe, le permitió afrontar el duelo con esperanza, “Sam está con Jesús y sé a dónde va. Solo necesitamos tiempo. Mi familia… y tiempo. Muchas oraciones”, le dijo al presentador de News Nation, Chris Cuomo.
Sam era un prometedor piloto de American Airlines, estaba a punto de casarse, lo que llenaba de alegría a su familia.
Su padre, Tim Lilley, lo describió como una persona amable y servicial, cuya vida profesional y personal estaba en un momento brillante. Sin embargo, la tragedia golpeó cuando el accidente aéreo inesperado cambió todo, dejando a su familia sumida en el dolor.
El fatídico accidente ocurrió cuando el avión regional de American Airlines, operado por PSA Airlines, colisionó con un helicóptero UH-60 Black Hawk debido a condiciones de hielo sobre el río Potomac.
Ninguna persona sobrevivió entre los 64 pasajeros del avión y las 3 personas a bordo del helicóptero.
Este incidente ha sido reconocido como el más mortal en Estados Unidos en casi 24 años.
Antes de convertirse en piloto, Sam estudió marketing y trabajó brevemente en ese campo. Sin embargo, su pasión por la aviación lo llevó a unirse a PSA Airlines, donde prosperó en su carrera.
Graduado de la Universidad Georgia Southern en 2018, su alma mater lo describió como un ex-alumno destacado que brilló en su trayectoria profesional, lo que subraya el impacto positivo que tuvo en su entorno.
Su padre Tim se enteró del accidente al ver las noticias y, al principio, no sospechó que su hijo estuviera involucrado.
Sin embargo, tras contactar a la prometida de Sam, se dio cuenta de que su hijo estaba en el vuelo que pasaba por el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan.

La angustia de Tim se intensificó al entender que no había noticias de su hijo, lo que marcó el inicio de un proceso devastador de espera.
Al ser un ex piloto de helicóptero del ejército, expresó su profundo dolor por la pérdida de su hijo, quien había logrado tanto en su corta vida. Las operaciones de rescate y recuperación comenzaron rápidamente, pero el enfoque principal ha sido el impacto emocional en las familias afectadas por esta tragedia.

EDICIÓN REVISTA EL ORADOR