El equipo al que pertenece el destacado jugador le ha impuesto varias reglas, qué de cumplirlas, le traerán beneficios económicos; entre ellas está el no hacer mención del Todopoderoso.
Una de las cláusulas en su contrato con el Paris Saint-Germain Football Club (PSG), especifica que no puede hacer «propaganda religiosa que pueda perjudicar la imagen y la unidad del club».
Aquellos son algunos de los requisitos (impuestos por el propietario del equipo, un poderoso jeque de Qatar) impuestos a Neymar y que le dan acceso a «bonus éticos» por simplemente ser «cortés, puntual, amable y estar a disposición de los aficionados».
Seguir esos reglamentos le permitirán al futbolista ganar 541.680 euros extra, unos 6,5 millones de euros más al año por ser transparente y no generar polémicas.
El periodista Esteban Urreiztieta, también reveló en un reportaje que el jugador también debe mantenerse al margen de hacer comentarios negativos sobre el equipo y su personal de manera pública y en redes sociales; por lo que debe esforzarse por ser respetuoso en todos los sentidos.
En conclusión, PSG quiere que Neymar tenga «un comportamiento ejemplar, especialmente en el campo», pues buscan cuidar la imagen del equipo.
Si Neymar llegase a incumplir alguna de estas cláusulas, significa que no califica para obtener las bonificaciones. Hasta ahora, el PSG ha pagado un total de 489.228.117 euros con el fin de tener a Neymar entre sus jugadores.