Según los informes, una mujer china ha sido arrestada por compartir repetidamente el Evangelio cristiano con el presidente chino Xi Jinping y su esposa, Peng Liyuan.

La mujer, llamada Zhou Jinxia, ​​estuvo en el punto de mira el 20 de febrero, después de  que, según los informes, fuera  a la sede del Partido Comunista de China en Beijing, donde sostenía un cartel que alentaba a Xi a abrazar a Cristo.

Según Bitter Winter, la acusada visitó repetidamente el área de Zhongnanhai, donde viven altos funcionarios comunistas, con el objetivo  de decirle a Xi que “acepte a Dios y se arrepienta públicamente”.

Según los informes, la última señalización de Zhou  decía : «Dios ama a la gente del mundo y está llamando a Xi Jinping».

Al parecer, la policía la llevó de regreso a su ciudad natal, Dalian, y la arrestaron al día siguiente. El cargo contra Zhou es “buscar peleas y provocar problemas”,  según  International Christian Concern.

Y resulta que  esta no es la primera vez  que es detenida por tratar de difundir la fe entre los líderes chinos. Según los informes, los arrestos anteriores se desarrollaron en 2015, 2016 y 2018.

Aún así, ha  seguido compartiendo  su fe para llegar a Xi y a otros. De hecho, Bitter Winter  informó  que ha estado tratando de evangelizar al presidente chino desde que asumió el cargo en 2013.

Según los informes, Zhou fue a Zhongnanhai el día de Navidad de 2014 y sostuvo un cartel que decía: “Dios, que ama al mundo, está llamando a Xi Jinping y Peng Liyuan”.

Solo tomó unos minutos para que la detuvieran y la enviaran a una evaluación de salud mental; se encontró que era competente sana y fue puesta en libertad.

Sin embargo, Zhou continuó yendo al área con mensajes similares. En 2016  proclamó : “La libertad, la igualdad, la justicia y la integridad vienen de Dios. ¡Que se enaltezca la patria, el pecado es una humillación del pueblo! ¡El reino de los cielos está cerca, debes arrepentirte!” Una y otra vez, fue arrestada por sus acciones.

Según los informes, Zhou también se ha enfrentado a otras dificultades, incluida el desalojo injusto de su casa.